Londres 2018 - 3 JUN (dia 3)

Dicen que "al mal tiempo, buena cara" pero hoy podríamos parafrasearlo directamente con un "al calor de Londres, buen museo refrigerado". Hace cosa de un mes nos enteramos casualmente (y no es broma!) de que esta exposición estaba en la National Gallery. De Monet conocíamos más bien poco y habíamos visto alguno de sus cuadros más representativos, pero gracias a todo lo que hemos visto - y a la audioguía (imprescindible!!!) - hemos aprendido sobre la vida del autor, cómo ésta influye en sus cuadros y, sobre todo, el papel tan curioso e importante que ejerce el elemento arquitectónico. Hemos estado poco más de dos horas (que se nos han pasado rapidísimo) y hemos disfrutado como enanos. Creo que a partir de ahora prestaremos una atención muy especial a Monet. 

Al salir del museo, el calor se ha vuelto a sentir de mala manera. Al igual que nos ha pasado en otras ocasiones, estos calores húmedos hacen que valores cada vez más el verano seco-mesetero peninsular. Hoy hemos tenido unos 25ºC que se nos han hecho muy cuesta arriba, tanto en la calle como en el metro de vuelta al aeropuerto (por favorrrr, autoridades competentes de la materia... pongan ya el aire de una vez!!!!). 

Y cuando luego nos ha tocado esperar unos 30 minutos dentro del avión por culpa de las tormentas y el mal tiempo que había Barajas, ya nos ha dado igual. Sabíamos que el fresquito nos iba a recibir con los brazos abiertos al aterrizar. Ole y ole!!

En fin, no quiero dar una falsa impresión: la escapada ha resultado una gozada, se mire por donde se mire. El factor meteorológico no ha sido el mejor, pero obviamente compensa todo lo demás. Y seguiremos volviendo... Brexit mediante. Porque aquí siempre hay mucho que ver!

Buenas noches!!


...

Londres 2018 - 2 JUN (dia 2)

Inglaterra, cuna del ferrocarril, tiene una poderosa red de trenes que mantiene comunicada gran parte de sus poblaciones. Desde Londres es fácil moverse por toda la isla. Así que hoy aprovechamos esta maravilla de la modernidad y nos hemos ido a Oxford. Para ello, primero teníamos que ir a Paddington Station y allí comprar los billetes. Reconozco que hemos llegado sin tener mucha idea de cómo funcionaban las máquinas pero casualmente no nos ha hecho falta saberlo porque una amable trabajadora de la GWR (una de las empresas de ferrocarriles del país) nos ha sacado los billetes de i/v gracias a su máquina expendedora portátil. Hemos tardado menos de un minuto en tenerlos en la mano. Y tan sólo diez después ya estábamos sentados en el tren.

Recordatorio: estos billetes están sin numerar y en cuanto se abren las puertas del vagón, arranca la estampida de búfalos para pillar asiento. Qué estrés (y qué pereza) de situación.

Una hora más tarde estábamos ya en Oxford, una de las clásicas ciudades universitarias que hoy casi tenía más polen que gente (qué bonita es la primavera en estas latitudes, porfaaachúuus!!). Afortunadamente nuestra cita principal estaba en la Bodleian Library y no hemos tenido que esperar mucho para entrar en ella.  

Y es que ayer empezó una exposición que más de uno no querrá perderse: "Tolkien, creador de la Tierra Media". En ella se analiza un poco la vida del autor, su gusto y pasión por la caligrafía y las sagas nórdicas, la creación del idioma élfico, el diseño de las cubiertas de sus libros, ilustraciones importantísimas, mapas originales de la Tierra Media... en fin, toda una maravilla para los amantes de los libros del universo Tolkien. Ojo, que esto va de libros y no de películas de Peter Jackson. MUY recomendable.

Con menos viento y polen, ya hemos dado una vuelta por Oxford, acompañados de nuestra amiga M., a la que hacía años que no veíamos. Las casitas y los colleges siguen conservando ese aire encantador que tanto atrae al visitante. Aunque el efecto de la humedad sumado al calor casi nos deja baldados. Sin duda aquí se hace más insoportable que en Londres. 

Afortunadamente algunas tiendas ya empiezan a usar el aire acondicionado. Suena a risa, verdad? Es que eso sería impensable en la península (o en EEUU!), pero aquí parece que todo está establecido de alguna manera. Debe de ser como lo del  dicho ese del cuarenta de Mayo, sólo que aquí sustituyen el "sayo" por aire fresco enlatado. Estupendo, oiga. 

La casita tan preciosa que se ve en la foto de la derecha pertenece a la cadena de comida "Pret a Manger". Al igual que vimos en Bray (IRL) con su McDonald's, aquí se ha mantenido la estructura de la casa y se ha reformado todo de tal manera que puedes comer tu sopa, zumo o bocadillos mientras contemplas alucinado el techo, las paredes o la escalera de acceso al piso superior. Qué bonita. No hemos podido resistirnos y hemos comido aquí, por supuesto. 

La vuelta a Londres... en fin, ha sido algo que no vamos a olvidar en mucho tiempo. NO funcionaba el aire acondicionado (o ¿¿directamente no había??) y, sin persianas ni filtros de ningún tipo, nos iba dando el sol mientras la temperatura corporal iba subiendo por momentos. UFFFFF. Todos apiñados, con las ventanas superiores abiertas, por donde sólo entraba una mínima ráfaga de aire (con polen, claro!). Y luego somos nosotros los tercermundistas. 

JA y más JA.

Nas noches!


... ZZZZzzz...

Londres 2018 - 1 JUN (dia 1)

Con bastante retraso hemos salido hoy para Londres. La razón no ha sido otra que el tiempo revuelto y tormentoso que había en la zona del aeropuerto. Y es que, con el mes que llevamos, ¿qué otra cosa podríamos esperar?

De todas formas, no nos ha dolido en absoluto. El entretenimiento a bordo del A340 es una auténtica maravilla y casi que se te olvida lo que pasa al otro lado de la ventanilla. 

El vuelo ha sido muy tranquilo, incluso hemos echado una cabezadita. Pero, en cuanto hemos aterrizado, nos hemos dado cuenta de que mientras el fresquito de las tormentas acapara toda la península, justo por estas latitudes ocurre lo contrario. Además aquí el calor es húmedo (y pegajoso) y, según las previsiones, así seguirá todo el fin de semana. Paciencia, pues, y a hidratarse con alegría.

Bueno... ya sabemos que eso de "hidratarse" se entiende mejor cuando viene acompañado de comida y, qué mejor manera de empezar el finde que yendo a un pequeño restaurante donde te tratan de manera estupenda y comes platitos tan monos como el de la foto. Para los interesados, el local en cuestión se llama "Anglo" y con su menú de degustación diario tienes más que suficiente para saciarte, hidratarte y sentirte prácticamente en una nube. 

Hmmm....

Nas nochessss!



...Zzzzz...