No se si había comentado antes que Vermont es un estado donde uno tiene la sensacion de encontrarse en un terreno salvaje. Bosques sin fin, lagos, montañas, ciervos, ardillas... y alces! (ojito, no confundir con el aRce del sirope). Estos animales son más tipicos de Alaska y Canadá, pero a veces se adentran por estos lugares, asi que en muchos sitios aparecen carteles de aviso como el de la foto. A su lado, nuestra señal de la vaquita suena realmente a chiste... No vimos ninguno, pero quien sabe si en otro viaje tendremos mas suerte!
Hemos llegado al aeropuerto con mucho tiempo de margen. Ademas, nos habian retrasado algo el vuelo, con lo que hemos tenido tiempo de comer tranquilamente y hacer varias fotos por la terminal. Es un sitio pequeñito y supongo que los encargados del mismo querrán que el viajero se sienta cómodo, porque si no, no hay forma de entender cómo ponen mecedoras en vez de bancos por los pasillos. La verdad es que no deja de ser curioso, jejejeee!!!
Otra curiosidad para el viajero: la vieja torre de control hoy es un mirador. Atención al video, porque no tiene desperdicio:
Aprovechando la WIFI gratuita del aeropuerto, hemos descubierto por qué teniamos tanto frio: había 6ºC en el exterior!!! Afortunadamente, los tripulantes de Delta Airlines nos han hecho entrar en calor ofreciendonos un picoteo con bebida (cómo se valoran estas cosas ahora!)