Inglaterra 2013 - 15 SEP (dia 1)

Tengo que reconocer que siempre he asociado Septiembre a determinados conceptos estandarizados: colegio, estudios, rutina,... Un poco aburrido, vamos. Pero desde hace unos años - afortunadamente - el mes de Septiembre es sinónimo de VIAJE. Asi, en mayúsculas. Porque es el viaje que no puede faltar!!

Empezamos esta nueva aventura volviendo a tierras inglesas, aunque esta vez dejamos la capital (huy, qué raro, verdad?) para adentrarnos en ese desconocido mundo provinciano que tantas emociones provoca. Es un viaje que teniamos pensado desde hacía mucho (muchísimo) tiempo y que por fin hemos conseguido ponerlo en marcha.

Por temas de logística, ha sido el aeropuerto de Luton el elegido para darnos la bienvenida. Es uno de los aeropuertos "bajo coste" por excelencia, pero es que está tan bien montado que hasta dan ganas de repetir. Sirva como ejemplo que en el propio vuelo, ya te ofrecen los billetes para ir hasta Londres o hasta otros aeropuertos. Increible!

Recordatorio: Hay que pillar autobús en la parada 1A para llegar a la zona de coches de alquiler (y alli solucionar todos los trámites)

Hacía ya 4 años que no montábamos en un coche con el volante al otro lado. Qué extraño tener que adaptarse al nuevo entorno! Y por supuesto, qué pesadilla entrar en una rotonda!!!!

Queda demostrado que el GPS funciona estupendamente: nos ha llevado sin problemas hasta Canterbury, que es donde pasamos hoy la noche. Eso si: continúa demostrándonos esa tendencia enfermiza de pasar por todos los peajes que estén disponibles en la ruta. 

Por cierto!! Pensábamos que los cestos de monedas eran exclusivos de Irlanda y aquí también están implantados. Menos mal que esta vez he sido rápida y he podido grabar el momento de paso, jajaja!!!

Con la lluvia como compañera intermitente de viaje, hemos llegado finalmente a Canterbury. Ha sido muy fácil encontrar el alojamiento - estar en el recinto de la catedral tiene sus ventajas! - así que, tras hacer el check-in y dejar la correspondiente autorización en el parabrisas, hemos disfrutado un poco del centro de la ciudad. 

Quizá por ser domingo hayamos encontrado las calles demasiado vacías. Pero eso nos ha permitido hacer mejores fotos sin aglomeraciones ni curiosos de turno. Lo que se ve AQUI es la entrada al recinto de la catedral (estaba cerrada cuando hemos llegado, pero ya la veremos mañana tranquilamente).

Recordatorio: para controlar la entrada y salida de los clientes del hotel, hay una especie de "multipase" que te permite moverte sin problemas!

Siguiendo las recomendaciones de la recepcionista, hemos cenado (sin dudarlo) en uno de los sitios de moda de la ciudad: Deeson's. Se trata de comida inglesa con un toque de "modernillo" muy de agradecer. Todo estaba riquisimo pero voy a destacar el postre: yogur de vainilla acompañado de galleta y coulis de frutos rojos. Simplemente espectacular!!! 

Queríamos haber probado un vino local, pero ya el propio camarero nos ha advertido que era "algo fuerte", asi que nos hemos quedado con uno argentino. Todo un acierto, si señor.

Menos mal que aún quedan camareros sinceros dispuestos a todo con tal de que el cliente tenga la mejor de las experiencias.

:)