Como viene siendo habitual tras un montón de días de vacaciones, esta mañana nos ha costado mucho hacer la maleta. Demasiadas cosas vividas, demasiadas emociones y demasiados buenos momentos. Pero como dice el gran Winnie the Pooh, "how lucky I am to have something that makes saying goodbye so hard!" (=qué afortunado soy por tener algo que me hace tan complicado el decir adiós).
Con el ánimo un poquito bajo, hemos salido a dar el último paseo por la ciudad, con parada en Bryant Park y en la biblioteca (cómo no!), donde hemos pillado un par de libros muy interesantes.
Y mientras hacíamos el trayecto hacia el aeropuerto no dejaba de pensar en la intensidad con la que hemos disfrutado estos días. Es la ciudad de siempre, si, pero es que, como bien decía en su momento, cada vez hay algo que hace que el viaje sea una experiencia diferente.
Así que, como nos lo hemos pasado tan bien y nos ha gustado tanto, está claro que volveremos. No sé cuándo, pero volveremos. Y seguro que disfrutaremos como enanos y descubriremos cosas nuevas. Pues claro que si.
Ahora a descansar y a preparar el próximo viaje. Mientras tanto, un poco de American Beat para ir calentando motores.
♪♫♫ "Can you hear the American sound?" ♪♫♫
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